El ingreso imponible promedio de cotizantes de las AFP llegó a $ 1.224.466 en septiembre, traduciéndose en un incremento de 3,9% real en 12 meses.
Sin embargo, un informe del Centro de Estudios Financieros del ESE Business School de la Universidad de Los Andes advirtió que el hito debe analizarse en profundidad, ya que se dio en el marco de una caída en el total de cotizantes de casi 32 mil en un año y de más de 300 mil respecto al máximo histórico de enero de 2023, cuando el número de personas que ahorraba para la pensión superó los 6 millones.
La disminución en el número de cotizantes se explica de forma importante por hombres, que cayeron en 180 mil en relación con enero de 2023, lo que según el ESE, “podría tener algo que ver con la crisis del sector inmobiliario, que emplea mayoritariamente hombres”.
Cecilia Cifuentes, directora del Centro de Estudios Financieros del Ese.
“El mix de estancamiento de la actividad, junto con una agenda de políticas que ha encarecido los costos de la contratación formal, está teniendo los efectos esperables, es decir, menor empleo formal en grupos menos calificados”.
En ese contexto, el documento alertó que la caída constante en el número de cotizantes puede conllevar que el aumento del ingreso imponible promedio se explique, en parte, por un cambio en la composición de estos, con un menor número de cotizantes de bajos ingresos.
El análisis del centro de estudios demostró que los cotizantes que ganan menos de $ 600 mil han caído en casi 600 mil en un año, de los cuales 433 mil están en el tramo entre $ 500 mil y $ 600 mil.
“Es posible que algunos de estos hayan pasado al tramo siguiente, de entre $ 600 mil y $ 750 mil”, sostuvo el informe, aunque aseguró que en ese segmento aumentaron en algo menos que 300 mil cotizantes, por lo que “se puede afirmar que muchos dejan de cotizar, ya sea porque pierden el empleo o pasan a la informalidad”.
Foto: Jonathan Duran
El resto de los tramos de ingreso aumenta levemente el número de personas que aportan para su pensión, lo que puede explicarse por reajustes salariales por IPC.
Para la directora del Centro de Estudios Financieros del ESE, Cecilia Cifuentes, “el mix de estancamiento de la actividad, junto con una agenda de políticas que ha encarecido los costos de la contratación formal, está teniendo los efectos esperables en esa situación, es decir, menor empleo formal en los grupos menos calificados. Esto debería llevar a ser más prudentes en las futuras alzas de salario mínimo y en otras propuestas, como la de negociación ramal, que dificultarían aun más el empleo formal de esos grupos”.
Menos jóvenes cotizando
Un cambio en la composición etaria de los cotizantes es otra de las conclusiones a las que llegó el informe del ESE, en parte por temas demográficos, pero también por efectos sobre el mercado laboral para este grupo de la población.
En detalle, en el último año, el número de cotizantes menores de 35 años cayó en 79 mil, explicado principalmente por personas de entre 20 y 30 años, mientras que los mayores de 35 años aumentaron en cerca de 28 mil. Eso sí, entre los mayores de 35 años, el tramo entre 45 y 50 años también exhibió retrocesos en el número de personas que aportan a su cuenta en la AFP.